LA VIOLENCIA DE GÉNERO. HAY VIDA MÁS ALLÁ

Lo ignoraba y lo siento, incluso siento cierta vergüenza como ciudadano. Es sencillamente humillante, vergonzoso e inadmisible para una sociedad, solidaria, equitativa y culta, que hayan sido asesinadas casi 2000 mujeres por sus verdugos o compañeros, desdeque comenzó su triste contaje. En la semana anterior, cuatro en tres días. Es algo que se pudiera corresponder con un accidente masivo, donde desaparecen hasta las campanas de la iglesia del pueblo. No puede ser, hemos de adquirir un compromiso social que nos permita ser vigilantes y actuar en consecuencia.              

El comienzo del penoso y desgraciado proceso, generalmente, es sencillo y sutil, no se observan estridencias, él, impresiona de tener un comportamiento normal, incluso  amable y seductor, hasta gusta a las amigas de la potencial “pieza”, persiste y persiste, y da comienzo una aproximación, cristalizando en poco tiempo en una relación de pareja, en principio de tanteo, aunque él ya comienza a descubrirse sin darse cuenta.

En el tiempo, va proponiendo, cada día, con mayor grado de insistencia, el alejamiento, primero de las amigas, “¿por qué tenemos que compartir algo nuestro, con nadie?”, de este modo, el alejamiento se va generalizando, y el foso de separación con los suyos, se hace más profundo.

Comienza entonces una actitud de presión, con los comentarios de control de su vida, “cuando y adónde vas, con quien y de que has hablado, has tardado mucho,  solamente para hacer ese recado, vas vestida así, no te parece una exageración etc.”,  además se suma el referente a sus capacidades, que en principio pueden parecer de broma, pero que van subiendo de tono, p.ej. “que poco sabes, cuida cuando estemos con los demás tus formas, habla menos y así no meterás la pata, no hables demasiado, no sé porqué pierdes el control y dices tonterías”. Todo ello va minando la seguridad de la joven, aislándose cada día más, hasta llegar a la total desconexión, sola, espera tensa y expectante a su única conexión con la vida, a su maltratador. 

Siempre expectante, espera el momento del encuentro, muy inquieta, ignora el humor con el que llegará, y fantasea buscando hacer grato el encuentro, pero nunca acierta, puede surgir un absoluto silencio que no se atreve a romper, aunque la comida que espera se enfríe, o gritos por algún insignificante aspecto. Así progresa el desencuentro, y surgen, además del control y el desprecio, los empujones, cada díamás enérgicos, impetuosos y explosivos, cada díamásdestructores y dramáticos, hasta llegar a la agresiónfísica. Enprincipio puede ser una bofetada, después una patada, o algún puñetazo, para llegar más tarde la pelea, las palizas con ensañamientos, la fiera que se desinhibe y saca toda su agresividad, rabia, frustración y explosividad sin control.

Es igual que se dé la presencia de hijos, o el tipo de trabajo, o su formación académica,  cultura, o  familia, todo es igual para la expresión de la rabia,envuelta de destrucción. El desprecio, la necesidad de control, la ira, la agitación es tan grande, que le desborda, y la explosión se hace inevitable, convirtiéndose,porque le gusta, en cotidiana.

Generalmente lo saben los familiares, sus padres ledirán que el matrimonio es sacrificio, seguro que para ellos lo ha sido, y los suegros le dirán, que siempre ha sido muy nervioso, ambos por otra parte coincidirán en que es buen trabajador, y por los hijos, o por el quédirán, le recomendarán esperar.La mujer piensa cada día, en el día siguiente, ¿cómo será, cambiará, se dará cuenta que esto no es una vida normal?, al final se da cuenta de que cada día es peor, que vive en un infierno, pero que la salida es muy complicada. Carece de empleo, se ve sola sin ayuda, quizás alguna parientela podría ayudar.            

Un día toma una decisión, aprovechando una rendija da el paso de denunciar los hechos, se inician las tramitaciones legales, y se acoge al abrigo de una fundación, donde disminuye el temor, y además recibe tratamiento, y posteriormente le buscarán trabajo. Se sientemásprotegida, al sentirse comprendida, yrecibir formación. Sigue el proceso, se celebra el juicio, se separa, y con ello comienza una vida diferente, distinta,esperanzadora, ha encontrado trabajo no sin dificultades, donde está contenta, se siente comprometida y satisfecha

Nadie tiene en cuenta su historia, sino sus capacidades y la integración en su puesto de trabajo, y con ello su productividad. La mujer maltratada trabaja por encima de la media, apreciando más, la libertad y autoestima que el sueldo. Hemos de facilitar este camino.

Autor Dr Baltasar Rodero, Psiquiatra, Santander 2021.