Ludopatía: juego patológico. Para el ludópata, el juego supone una básica y primaria necesidad, una droga vital y esencial para poder subsistir, no puede pasar sin él, es una imperiosa necesidad, es una droga que le convierte en drogadicto, siendo la adicción la base del binomio, por lo que nos situamos frente a una grave enfermedad. No todos los juegos van a producir dependencia, ésta solo se da en los que vinculan, al darse en un corto espacio de tiempo, apuesta y premio. Aquí podemos especialmente situar al bingo, las máquinas tragaperras y el juego online.

Para el ludópata, sólo existe el juego, es el fundamento de su vida, el único referente donde pivota la génesis de todas sus necesidades, es lo prioritario, incluso lo exclusivo, nada ni nadie, familia, trabajo, amistades, ruina, relaciones sociales, etc., es más importante.

Presenta las singularidades de una adicción, aunque sin sustancia, es una adición por ello sin química, provoca una conducta placentera, y su  consumo va en aumento con el tiempo, con el objetivo de la obtención del premio deseado. Como en todas adicciones, se incrementa la secreción de dopamina y endorfina, que actúan como reforzadores de este comportamiento, al ser estimulantes.

La génesis de la misma es compleja, y parece fruto de la confluencia de varios factores, entre los que destaca la genética. El hijo de un drogadicto, tiene una mayor predisposición para iniciarse en el consumo del juego, en caso de que se exponga al mismo. No obstante,  el aprendizaje,  parece que es más decisivo. Padres, familiares cercanos, educadores o ambiente en general, pueden provocar, por su modelo de comportamiento,  cierta predisposición hacia el juego.

Como ocurre con el resto de adiciones, un ambiente en el que el juego tenga un especial protagonismo, al que se acerque un individuo, más o menos  joven, con baja autoestima, poco asertivo, con escaso criterio, con problemas psicológicos, con identidad poco definida, solo y sin apoyos ni referentes concretos, se  podría afirmar que estamos frente a un candidato seguro.

En esta descripción de situaciones y circunstancias, hay que tener en cuenta la publicidad, siempre multicolor, brillante y ruidosa, en la que además de venderte facilidades, pues te regalan un dinero para tu inicio, te venden la solución de todos tus problemas, y con ello, en el mismo paquete la eterna felicidad, pudiendo disponer de todas las comodidades y fantasías soñadas.

Esta situación, está dañando gravemente la estructura familiar normal y su dinámica, y de forma especial aquellas que sufren ciertos desajustes, o son deficitarias en orden, compromiso, comunicación, apoyo mutuo, ensamblaje etc., en ésta, cualquier miembro, hombre o mujer, crédulo, imaginativo, generoso, vulnerable, inestable, impulsivo, solitario, desorientado, sin rumbo fijo, es “pieza propiciatoria del mensaje de salvación”.

El individuo iniciado cambia, comienza a centrarse en el juego, se va lentamente obsesionando, y solo busca y le preocupa encontrarse con el premio, de aquí que comience a alejarse de su forma de vida cotidiana, amigos, familiares, hábitos, se anarquiza frente al trabajo, con ausencias en principio esporádicas, y más tarde, llega la irresponsabilidad y el abandono, sintiéndose cada día más solo y alejado de su norma, perdiendo la capacidad de articular una conversación por miedo a delatarse, y por ello huidizo, raro, lejano y solitario.

Sigue profundizando en ese itinerario patológico, enfermizo, cambia el carácter, se hace mas huraño y suspicaz, con problemas visibles laborales, a los que se comienzan a sumarse los económicos, gasta más dinero, pide más y gasta más, y las deudas se acumulan con familiares, amigos, e incluso desconocidos y bancos. Así se va haciendo visible la situación, suscitándose la presencia de cambios de ánimo, crisis o estados de ansiedad, y episodios depresivos, fruto de su mala conciencia, y junto a ello la crisis final. Surge la conciencia de la familia de que estamos frente a algo grave, que se ha desarrollado lentamente, que ha ido creciendo, no siendo fácil en ocasiones acotar la situación final, además de la patología personal del paciente, generalmente se dan unas deudas, cuya acotación no siempre es fácil, aunque es imprescindible para poder comenzar desde cero.

Generalmente, el comienzo se realiza con máquinas tragaperras, son las más accesibles, están por todas partes, en todos los lugares de esparcimiento y bares, son las que plantean menos problemas para su uso, y se necesita poco dinero para empezar a jugar, en principio, solo sirve una  moneda. Por todo ello, parece que cualquiera puede ser un candidato, de tal forma que un individuo solitario, tímido, sin apoyos ni amigos, con escaso criterio, sin rumbo fijo, con una moneda, y con deseos de obtener algún premio, es un candidato ideal. En las máquinas, por la facilidad y el acceso que permiten, los candidatos son de forma prioritaria, generalmente adolescentes, aunque también participan los adultos.

En los bingos se acentúa la visita de los mayores, les permite salir de casa, visitar un ambiente distinto y animado, acompañarse de amigos, y además pasarlo entretenido, y si además obtienen el premio de una línea, o de un bingo, la alegría y el refuerzo de su comportamiento es tan grande, que plantea en no pocas familias, problemas de convivencia.

El juego online ha surgido mas tardíamente, es el más actual, y el que tiene más fácil acceso, y el que además cuenta con mayor publicidad, 2.744.100,00€ en 2017, es cómodo, se realiza desde cualquier lugar, no se necesita más que la fantasía, y cuenta con un premio antes de jugar, mediante un adelanto como gratificación previa. El juego en 2017 movió 37.740 millones.

La educación es prioritaria como prevención, y la patología en todas sus formas dispone de tratamiento, desde un abordaje mixto, psiquiátrico y psicológico. 

Fuente: Dr. Baltasar Rodero. Psiquiatra. Enero 2009