27 Nov 2020
J noviembre, 2020

¿Por qué te cuesta tanto hacer deporte?

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¿Por qué te cuesta tanto hacer deporte?

En estos momentos estoy haciendo deporte mientras comparto con vosotros estas letras. Tenemos la facilidad de utilizar un dictador de voz, un bluetooth o un manos libres para poder hacer deporte mientras hacemos otra cosa. ¡Ya no hay excusas! Así que me pregunto yo ¿por qué te cuesta tanto hacer deporte?¿Cuál es tu excusa?.

Solo el 14% de los españoles asegura hacer ejercicio con regularidad, según datos del Eurobarómetro 2017. ¡Como pueden ser verdad estos datos 😱!.

Podemos enfrentarnos a la práctica del deporte desde dos puntos de vista. El primero de ellos es desde una visión externa. Motivos como la apariencia, querer gustar a los demás, evitar el qué dirán, etc. nos mueven hacer deporte. El segundo punto de vista es más intrínseco en el que solo tu propia decisión es motivación suficiente para levantarte del sofá y hacer deporte.

Todos hemos vivido alguna vez un vínculo muy especial con el sofá, la cama o con quedarnos en casa donde el sedentarismo permanece día a día. Una actitud narcisista no es suficiente para tomar la decisión y romper con esa rutina tan negativa para nuestro cuerpo y nuestra mente. Necesitamos que algo dentro de nosotros se mueva para encontrar un deseo real para realizar ejercicio físico de manera continuada y prolongada en el tiempo.

Se ha demostrado que la práctica del deporte nos convierte en personas no solo físicamente más sanas sino mentalmente más sanas y felices. Quienes hacemos deporte nos enfrentamos a la vida de una manera más positiva y enérgica y mejora notablemente nuestra autoestima.

Y tu, ¿por qué te cuesta tanto hacer deporte?

¿Por qué te cuesta tanto hacer deporte?

Dafne Cataluña, directora del Instituto Europeo de Psicología Positiva, nos da las claves para vencer la falsa comodidad del sedentarismo:

1. Tener un apoyo. «Las figuras de autoridad que nos escuchan con empatía, que nos dan un feedback significativo para mejorar sin presionarnos al logro de la meta y que nos ofrecen opciones con cierto punto de exigencia y desafío nos facilitan sentirnos motivados».

2. Encontrar una actividad que conecte con una necesidad básica o con una de nuestras fortalezas. «Las personas que destacan por su espíritu de cooperación prefieren actividades el grupo donde puedan disfrutar de compartir la experiencia».

3. Encontrar un para qué emocionalmente saludable. «El deporte es una de las actividades que más estados de fluir suscita, por tanto es una gran oportunidad para sentir emociones positivas. Se puede sufrir y disfrutar al mismo tiempo, siempre y cuando la actividad sea asumible para nuestro nivel, retante y al mismo tiempo nos ayude a crecer, física o psicológicamente».

Ahora que estoy terminando de dar mi paseo, puedo decirte que me siento más feliz. Ayudo a mi cuerpo a prevenir enfermedades, a mantenerse en forma, a conciliar el sueño y a tener la motivación suficiente para volver a salir mañana a la calle. Permítete sentirte más feliz y pregúntate si hay algo que te motive a hacer deporte. Seguro que dentro de ti hay un «¿por qué?» y un «¿para qué?», déjalo salir y disfruta del deporte!!

Fuente: El Mundo. Gema García Marcos.